Todos los que nos dedicamos a correr como afición tenemos alguna anécdota que contar pues son tantos los días que salimos, que tarde o temprano algo significativo nos llega a ocurrir.
Hoy os traigo las dos que me han sucedido últimamente: una en una carretera comarcal y otra en una pista de atletismo.
Iba rodando a 5’ el km por una carretera comarcal muy estrecha en Fiñana, cuando a mi lado se me pone un coche. El joven conductor me indica:
- Oye, vas a 15 km/h.
- ¡Qué va! – Le replico yo-. Voy a 12 por hora.
- Al final te vas a hacer un atleta –me contesta.
Y claro está, se me fueron los pies y terminé corriendo a 4’30. ¡Qué mala es la compañía!
Siguiendo las pautas de mi entrenador me acerco a una pista y me dispongo a hacer esas temidas series en las que hay que apretar a una velocidad exigente. Esta vez tocaba hacer miles a ritmo de 4’05-4’10. Tras el calentamiento preceptivo comienzo la primera serie. Observo a un atleta que me precede en la calle interior de la pista, trotando a un ritmo suave. Por conversaciones que ya he tenido previamente con él creo que es disminuido psíquico. Al llegar a su altura me pregunta qué estoy haciendo. Le contesto que intento hacer miles a 4’10 y él, que ya me acompañaba en estos acelerones, me cuenta que va a hacer series de 800 metros en 80 segundos. Le indico que a ese ritmo sería récord del mundo, y que seguramente querría decir series de 400. Pues él insiste en que no, que son series de 800 en 80. Recordemos que estábamos lanzados en un 1000, que ya me cuesta hacer en solitario, pues haceos una idea de cómo iba ya con la discusión.
A todo esto, el hombre se me escapaba y eso que él estaba tranquilamente de charla. Al final tuve que abandonar el trabajo previsto porque si ya me cuesta hacerlo en condiciones normales, imaginaos en pleno debate.
Hoy os traigo las dos que me han sucedido últimamente: una en una carretera comarcal y otra en una pista de atletismo.
Iba rodando a 5’ el km por una carretera comarcal muy estrecha en Fiñana, cuando a mi lado se me pone un coche. El joven conductor me indica:
- Oye, vas a 15 km/h.
- ¡Qué va! – Le replico yo-. Voy a 12 por hora.
- Al final te vas a hacer un atleta –me contesta.
Y claro está, se me fueron los pies y terminé corriendo a 4’30. ¡Qué mala es la compañía!
Siguiendo las pautas de mi entrenador me acerco a una pista y me dispongo a hacer esas temidas series en las que hay que apretar a una velocidad exigente. Esta vez tocaba hacer miles a ritmo de 4’05-4’10. Tras el calentamiento preceptivo comienzo la primera serie. Observo a un atleta que me precede en la calle interior de la pista, trotando a un ritmo suave. Por conversaciones que ya he tenido previamente con él creo que es disminuido psíquico. Al llegar a su altura me pregunta qué estoy haciendo. Le contesto que intento hacer miles a 4’10 y él, que ya me acompañaba en estos acelerones, me cuenta que va a hacer series de 800 metros en 80 segundos. Le indico que a ese ritmo sería récord del mundo, y que seguramente querría decir series de 400. Pues él insiste en que no, que son series de 800 en 80. Recordemos que estábamos lanzados en un 1000, que ya me cuesta hacer en solitario, pues haceos una idea de cómo iba ya con la discusión.
A todo esto, el hombre se me escapaba y eso que él estaba tranquilamente de charla. Al final tuve que abandonar el trabajo previsto porque si ya me cuesta hacerlo en condiciones normales, imaginaos en pleno debate.
17 comentarios:
Lo leo y me da ahogo. ¿Pa qué correr tanto, Gregorio? ¿Qué prisas tienes? :-)
Rigoletto
Y muchas más que debes contar, un abrazo
Ocurre aveces que algunas "guerras" dialécticas las tenemos perdidas porque las verdades pueden llegar a ser adsolutamente realivas pero eso sí siempre subjetivas. Además para poder demostrar algunas cosas es conveniente hacerlo a menos pulsaciones.
Yo soy incapaz de hacer algo más cuando corro; soy incapaz hasta casi de respirar.
Saludos
jejeje, series de 800 en 80 segundos, consiguió terminar alguna? porque a esos ritmos a los 200 metros el ácido láctico lo tienes a la altura de las orejas....y sí, te estás convirtiendo en todo un atleta, pero no te emociones, jeje, un saludo.
Anecdotas tenemos miles, y si es verdad que cuando alguien se pone a tu lado y encima te calienta entonces subes el ritmo automaticamente, como cuando vemos a conocidos en las carreras vamos.
Pedazo de nivel tenia el compañero, no? con ese 800.
Jajajaja, qué crack!! 800 en 80 segundos. Me parto, te imagino ahí sufriendo intentado mantener el dichoso ritmo y el otro pobre hombre a lo Forrest Gump. Qué grande!!
Un saludo!
Vaya amigos vacilones que te echas en los entrenos...
Greg, que comentan por ahí que has batido tu récord en la Media maratón de Motril. Cuenta, cuenta...
800 metros en 80 segundos?????
A 10 metros por segundo... no esta mal, aunque un pelín más despacio que Usain Bolt en sus record del mundo.
Un abrazo
Ja,ja...a lo mejor eran 80 pasos..pero pasos de baile, claro
Pues yo le habría cronometrado....
Un saludo
Quique
Y al chaval le tocaban series lentas ese día.
No te entretengas con los compañeros y dales caña, que luego dicen que vas lento
Saludos amigo mio
Anda que... de esas habrá tantas... Personalmente ahora mismo no recuerdo ninguna pero vamos, que anecdotas siempre salen cuando menos te lo esperas. 800 en 80 segundos, que tío, que tiemble Usain.
Un abrazo amigo
Hola Gregorio...gracias un millon por haberte tomado tu tiempo en ver el blog ...te sigo viendo ...un abrazo
Me es imposible hacer miles charlando Gregorio, así que te comprendo. Un abrazo
Rigoletto: sólo estamos practicando por si se nos acerca el Inspector de Hacienda.
Alvaro Ruiz: habría muchísimas. Todos tenemos experiencias de este tipo.
Pedro Gª Carrasco: tenías que haber estado en la situación. Jadeando e intentando hacer los cálculos al colega para convencerlo de que era un crack.
Joselop44: se puede hablar mientras corres si vas al ritmo adecuado. Lo que pasa es que se nos van los pies...
Juanito: ¿es que por ahí arriba no sois capaces de hacer esas series? Juas, juas, juas.
Lay: éste es un crack sin descubrir aún. Lo que pasa es que le da corte saltar a la fama mundial, por no estropearle el reinado a Usaim.
Sonia: la verdad es que al final me aburrió y se me fueron al traste todos los planes previstos.
Fran: yo creo que en matemáticas no estaba muy ducho. Eso sí; correr, corría que no veas.
José Antonio: como ya te dije, ojalá hubiese sido cierto. Estamos flojos, flojos, intentando coger ritmo.
CarLitros: es un poco más lento que Usaim pero porque son de 800. Cuando se ponga a hacer series de 100 se va a enterar el jamaicano, jejejeje.
Quique: por eso me gusta entrenar en solitario, porque me desconcentran los grandes astros del atletismo.
Periko: pues no lo había pensado bajo ese punto de vista. Si le tocaban series lentas...
Carlos: lentos ya somos de antemano. Cuando nos dan conversación ya somos la repera.
Crazysoul: si contásemos todas las que nos pasan, entre unos cuantos escribiríamos un libro. ¡Ha nacido una nueva estrella del atletismo!
Blanca: ninguna molestia. Ya le iré pasando el enlace a gente que seguramente estará interesada en visitarte. Saludos.
Paco Montoro: a mí me cuesta charlar mientras rodamos, pues en series ya supondrás.
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