EL BAILE DE APELLIDOS CON #HUMOR

(Imagen de "FreeCat")

Los apellidos funcionan, hasta el momento, como un ecosistema: crecen, se multiplican y los más débiles pueden incluso llegar a desaparecer. Pero esto puede cambiar a partir de tan sólo dos años.

Lo último que se ha escuchado en los medios de comunicación sobre regulaciones legales es el proyecto que está en marcha para que el padre y madre decidan el orden de los apellidos de su prole, en pro una igualdad no sexista.

En los países anglosajones, tengo entendido, cuando una mujer se casa toma el apellido del esposo siendo totalmente radical la asignación. En cambio, me parece, en Portugal los hijos toman el apellido de la madre.

¿Qué está en proyecto en España? Si los progenitores no indican nada, se sigue la norma que desde antaño se ha aplicado. Pero si desean invertir el orden de los apellidos, se cambia y en ese caso el hijo o hija tendrá, como primer apellido, el de la madre.

El conflicto está cuando padre y madre no estén de acuerdo. En tal caso, según escuché en la radio, se tomará como primer apellido el que esté antes en orden alfabético. Si, por ejemplo, el padre es Rodríguez y la madre López, el crío en cuestión se llamará López Rodríguez (si no hay acuerdo entre la pareja).

Puede darse el caso de alguna madre extremadamente feminista que, apellidándose su marido Guisado y ella también, se vaya al registro para que sus hijos se llamen Guisado Guisado pero haciendo constar que el primer Guisado corresponde a su apellido, lo cual será todo un desaguisado.

Lo que yo me pregunto es:

Para hacerlo realmente justo, ¿no se va a tener en cuenta la opinión del butanero?

Ya que estamos en el mundo de las NNTT, apliquémoslas en este caso y todos tan contentos. Imaginemos que el padre tiene de apellido Matarín y la madre es Ereal. Un programa informático mezcla las letras, distribuye y saca los dos apellidos finales.